


Aquí podemos ver como Hijitus y Pichichus disfrutan de un ensayo y festejan con alegría, la sin igual interpretación del bandoneón mayor de Trulalá :
ANIBAL PUCHO...
Pero como a los grandes artistas, el reconocimiento le llegó fuera de su terruño, más precisamente en VENECIA. A continuación, recordamos ese momento:
Aquí vemos como Pucho entona "¡POBRE ARRABAL!" en plenas aguas venecianas, maravillando al gondolero que lo ovaciona con un "¡BRAVÍSIMO!" y generando el clásico fastidio de su amo y maestro...
La inconfundible voz de Pucho llega a oídos de Hijitus, que también se encuentra navegando por Venecia junto a Oaky y Pichichus (gustitos que se da la gente...).
Por alguna razón que no viene al caso, la delatora voz de Pucho entonando "¡POBRE ARRABAL!", en esta ocasión no debía hacerse oír, pero la nostalgia tanguera pudo más y le complicó los planes al "Profe"...