¡MARCHEN DOS SÁNGÜICHES DE CHORIZO! La frase me resulta familiar... Tuve posibilidad de escucharla alguna vez, en otros tiempos. Mi padre, un porteño al que las vueltas de la vida lo condujo a Mar del Plata con sus "costumbres porteñas en la mochila", es de los que se resistieron a aceptar una palabra que definitivamente sería sinónimo de este "manjar" que figura entre las diez comidas preferidas por los argentinos que es el sandwich o "sánguche" de chorizo: CHORIPÁN.
¡Cómo han cambiado las cosas! De aquel "sanguche de chorizo con Bidú Cola" en menos de 50 años pasamos al "chori con Coca"... Hasta suena "raro" pedir un "choripan". La frase hoy es: ¡Marchen dos choris y una Coca!
Mi viejo insistió mucho con lo del "sánguche de chorizo". Calculo que a principios de la década del 70 comenzaron los primeros innovadores a llamarlo "choripan".
Aquel puestito de Crush, donde se despachaban sángüiches de chorizo las 24 horas para los taxistas, los choferes de la "12 de Octubre" (cuando el 531 tenía la terminal en Rodríguez Peña esq. Italia), con el tiempo se fue adaptando al modernismo y pasó a tener nombre francés ("LA LUMIERE FOLLE") y posiblemente mi viejo haya tenido que negociar entre "la nueva ola" y sus "costumbres porteñas" para poder seguir adelante. El fonógrafo y el tango le abrieron paso al wincofón y la música beat. Algo similar a lo que refleja la letra de una canción llamada "CORRIENTES ESQUINA TANGO"... (hagan un alto en la lectura para escucharla).
En la Mar del Plata de hoy existe un refugio llamado "EL SOCHORI DE DORAPA"... Comenta un entendido al respecto: "Atención turistas: si se deciden a visitar al Ciudad Feliz, no se pierdan la casa de comidas que está en la boca de todos. Sita en la popular esquina de Avenida Juan B. Justo y Dorrego, frente a la bicicletería de los Curuchet y el Parque Municipal de los Deportes, se halla la choripanería al paso "El Sochori de Dorapa".
Sitio de culto de todo marplatense cool, así como de los sufridos fans de Aldosivi y Alvarado (en su dura lucha por llegar alguna vez a Primera División) y de los asistentes a los shows musicales del Patinódromo o del Microestadio. En el piso todavía pueden recogerse algunas balas de goma, recuerdo de la memorable represión policial durante el show de Los Redonditos en junio de 1999. La especialidad de la casa es el choripán con chimichurri grado 6 de la escala de Richter, que ha llegado a hacer saltar por los aires un contador Geiger utilizado por unos investigadores australianos.
Alguna vez se le escuchó decir a un camionero habitué del SOCHORI DE DORAPA: "Ponerle tomate al chori es de p... El chori se come solo, con dos pedazos de pan y a lo bestia"...
Seguramente "Puchito" al gritar ¡MARCHEN DOS SÁNGÜICHES DE CHORIZO! sabe de que se trata... Como posiblemente lo sabía mi viejo en aquellos años 60 y 70.
Una relfexión final: "Siempre pensé que un chori es para un vegetariano, lo mismo que la manzana prohibida para Adán" ¡Se deben morder la lengua cada vez que pasan por un puestito de choris! ¿O no?
Hasta la próxima.
HIJITUSLOGÍA.